Si hay algo realmente mágico en el hecho de ser mujer es la capacidad que la naturaleza nos ha dado para concebir. El embarazo y la maternidad son condiciones femeninas únicas, que nos empoderan y aportan una felicidad inenarrable.
Sin embargo, los cambios hormonales y emocionales que experimenta una futura madre son muchos y muy variados, y pueden llevarnos a momentos de angustia, incertidumbre y miedo, ya que la vida de la mujer está a punto de cambiar para siempre (y, en el caso de que esté en pareja, es la vida de ambos la que también experimentará una profunda transformación).