El día del padre

Hoy día del padre…podría decidir la tristeza como opción, ya casi no recuerdo qué es tener la seguridad y la protección de la paternidad. Hace años mi padre decidió ausentarse de mi vida, tomar un camino nuevo… Durante años me posicioné en un lugar caótico, inestable, de lucha con la vida y lo que me estaba tocando vivir. Me abordó la tristeza y la falta de no tener la familia que yo deseaba tener.

En muchos momentos de mi vida he sentido un gran vacío y soledad, no encontraba mis raíces, ni paz interna dentro ni fuera de mí y mi fantasía me ponía en la falta, en la pérdida. Sólo me fijaba en las chicas que sí tenían esta figura presente, que sus padres estaban allí para ayudarlas con los estudios, que les ayudaban a hacer los primeros pasos por el mundo, que les ponían límites, horarios…

Siempre soñé cómo sería yo si tuviese allí un padre al que poder pedir consejo, donde me pudiese refugiar en los momentos en que la vida me pone a prueba, refugiarme en momentos de soledad y desesperación o también por qué no, donde encontrar el calor de un hogar y un plato caliente de vez en cuando. siempre me preguntaba ¿por qué yo? ¿por qué a mí que deseo y necesito con tanta fuerza esta figura, no me lo concede la vida?.

Pero la vida me dio un padre, es obvio que SÍ, si estoy aquí es porque mis padres me dieron la vida. Él eligió otro camino, decidió por razones que yo no puedo justificar ni tampoco juzgar irse y buscar otros caminos. Durante años fui una persona que destrozada por dentro destrocé todo lo que la vida sí me concedía, destrocé relaciones, amores, amistades, tampoco me dejaba querer por los que sí estaban, como mi madre.

Faltaron años de terapias, procesos y golpes de vida para comprender en algún lugar de mi alma que me estaba autodestruyendo. Entendí que el destino del otro no me pertenece y que mi destino era éste, me pusiera como me pusiera ante la vida. Tuve que pasar por todo ello para poder llegar a aceptar lo que hay y que la vida es caprichosa y que yo no tengo la suficiente fuerza para hacer que nadie se quede a mi lado. ¿ Quién soy yo para pedirle algo que él no puede/quiere darme?.

Es curioso cómo la vida me enseña en primera persona que el amor va más allá del querer agarrar, del querer estar juntos físicamente: mi padre siempre será mi padre, él me ha dado la vida. Cuanto más camino hacia la vida, más va cambiando mi concepto del amor.

Hoy puedo dar las gracias a la vida y a mí misma por no escoger la rabia y la tristeza como opción de vida y escoger aceptar con rendición la vida. Hoy sé que todos los trabajos realizados están dando su fruto, ya que siento paz interna y acepto con amor lo que la vida me da y también lo que me quita. Soy lo que soy gracias a todo lo que me ha sucedido, me siento llena de amor para entregarme a mí misma y al otro, y agradecida.

Me siento afortunada con mi trabajo de terapeuta, quizás en esta vida no sea posible para mí una buena relación con mi padre, sin embargo, sí sé que tengo el vínculo sanado con él, ya que puedo adorar las relaciones entre padres e hijos y puedo acompañar a sanar estos vínculos, tantas veces deteriorados y tan necesarios de sanar para encontrar La Paz con uno mismo.

Y desde este escrito surgido de mi corazón quiero hoy tener una especial mirada de amor y de reconocimiento primero a mi padre, por darme la vida; al padre de mis hijos, porque juntos creamos lo más preciado que tengo: mis dos hijos; a mi hermano, que le veo disfrutar como nunca con su paternidad, a mi otro hermano, que será padre en breve y desde la noticia, sus ojos están llenos de una inusitada esperanza y a mis queridos amigos terapeutas, que también en algún momento me hicieron ver la luz del camino, me acompañaron desde su sabiduría y me iluminaron el camino.

Qué curiosa la vida, que en momentos de tanto dolor encuentro en la polaridad: tanto amor por vivir. Quedarme en mi actitud de lucha sería quedarme en mi ego. El secreto lo tuve que aprender por supervivencia: no agarrarme a lo que no puede ser, dejar ir a quien ya no está en mi camino con respeto y saber que amar es dejar ir al otro donde el corazón le lleve.

Felicidades a todos a los padres.

firma Núria Remus

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

¡Apúntate al Newsletter!

Sé de los primeros en recibir mis últimos artículos del blog, calendario de nuevos cursos, noticias y mucho más!
Al apuntarte al newsletter estás aceptando los términos y condiciones descritos en nuestra Política de Privacidad.


© Nuria Remus. Todos los derechos reservados. Desarrollado por IndianWebs.