Y porque negarlo, estoy en duelo …

Y PORQUE NEGARLO, ESTOY EN DUELO …

Mi hija está en plena adolescencia, y es trabajo mío aprender de este nuevo tiempo y abrir puertas para que ella siga su ciclo.

Yo voy madurando, ella va haciéndose mujer y queriendo salir al mundo. Yo voy equilibrando mi energía, y ella está con energía empoderada de fuerza y de rotura con la madre…

La separación es natural aunque duela en lo porfundo de mi ser. La acompaño como sé y como puedo a que tome su fuerza interna, momento difícil en la adolescencia donde no se es niña, no se es adulta.

Los amigos son lo más importante en este momento para ella ; y a la vez, esta época donde él confinamiento me ha dejado estar más cerca de ella en todos los sentidos, vivirla, abrazarla, sentirla…A la vez no me engaño, está abriendo sus alas y yo cogiéndola de los pies para lanzarla hacia el mundo, dejándola volar para que pueda aprender de la vida.

La vida es un gran aprendizaje y aprender de las etapas de los hijos también es crecer. Tengo suerte, ella es una gran alma que ha crecido con los pies firmes en la tierra de la familia que he construido y con grandes pruebas a nivel relacional fuera.

Confiar en ella es lo que me queda, tiene herramientas y cuando la vida duele, sabe que tiene unos padres donde poder descansar. Ella sigue su proceso, y yo el mío de entrar en una nueva etapa.

Mi labor es brindarle la fuerza de la nueva mujer que hay, donde podrá tener voz, disfrutar de su cuerpo, de sus dones y cualidades, sin tanto miedo, sin tanta necesidad de esconder. Salir al mundo desde aquí con la fuerza de lo femenino, y a la vez con la energía masculina bien integrada en sí misma, para salir al mundo sosteniendo el vuelo y poniendo los límites claros, para que pueda delimitar su espacio sagrado en cualquier momento.

Esto le toca aprenderlo a ella, forma parte de su entrenamiento para llegar a adulta con su firmeza y energía. A nosotros como padres, nos toca sostener su vuelo y quedarnos en una mirada de presencia absoluta para estar en todo momento. La vida siempre va hacia adelante. Y que así sea.

Si vas a utilizar este texto te agradeceré que indiques la autoría, ya que hay un tiempo y una energía propia en él.

Seguimos…

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